Cuando nuestro colchón ya no brinda el apoyo y la comodidad adecuada afecta la calidad de nuestro sueño. Las personas a menudo no son conscientes de que sus colchones pueden ser una de las razones por las que no duermen bien.
Los colchones no duran para siempre: la vida útil se ve afectada por factores como la calidad, el cuidado, la cantidad de uso y los hábitos de sueño del usuario. Los cambios en el estilo de vida y en nuestros cuerpos también pueden requerir un cambio de colchón. Es por esto que te traemos 5 señales de las cuales debes estar atento para saber que debes cambiar tu colchón:
1. Despiertas con dolores y molestias que generalmente desaparecen a medida que avanza el día.
La señal más importante que te puede dar tu colchón será su incapacidad para ayudarte a dormir bien por la noche. Así es, cuando empiezas a sentirte incómodo en tu viejo colchón o si te levantas todas las mañanas con dolor de espalda, puedes estar seguro de que tu colchón está pidiendo urgentemente un cambio.
2. No duermes tan bien como solías hacerlo.
Si últimamente has notado que tu patrón de sueño se ve afectado y te despiertas en más de una ocasión a lo largo de la noche, es momento de revisar si tu colchón presenta alguna de las otras señales que te contamos aquí y por ello debas reemplazarlo.
3. Otras camas parecen más cómodas y prefieres dormir en estas en lugar de la tuya.
Esta es una de las formas más efectivas para saber que debes cambiar tu colchón. Si tuviste la oportunidad de dormir en otra cama y encuentras grandes diferencias en tu descanso, es posible que tu colchón esté presentando fallas a nivel interno lo cual no te permite descansar adecuadamente.
4. Sientes que tu colchón se hunde o rechina.
El desgaste de tu colchón también puede jugar un papel importante en su comodidad para dormir, los colchones generalmente comienzan a hundirse o rasgarse a medida que los materiales se desgastan.
5. El colchón tiene demasiado tiempo de uso.
Es esencial que sepas cuándo necesitas reemplazar tu colchón. A veces, el uso regular del colchón puede dejar la impresión de tu cuerpo sobre él. En tales casos, debes intentar girar el colchón cada tres meses como mínimo. Pero si tu colchón cuenta con más de 10 años debes replantearte seriamente cómo elegir su reemplazo.
